viernes, 28 de mayo de 2021

El pájaro dziú

 

Según una leyenda maya, Chaac, el señor de la lluvia, al ver que los campos estaban secos y las cosechas marchitas, decidió quemarlas todas, con el propósito de volver a sembrar las semillas, para que renacieran con mayor vigor. Convocó a todos los pájaros para que recogieran semillas de todas las plantas antes de quemar las cosechas.

Acudió gran número de pájaros, entre ellos Dziú pájaro con plumas de colores y ojos de color café y Toh, pájaro negro de hermosa y larga cola. Dziú y Toh tomaron la delantera a los demás pájaros, pensando que la primera semilla que había que salvar era la del maíz, por ser la más importante. Cuando ambos llegaron a los cultivos, vieron que el incendio era muy intenso. Toh, al ver las llamas en los maizales, tuvo miedo, se olvidó de maíz y recogió unas semillas del tomate verde. Dziú, si embargo, sin importarle que se le quemaran las alas, se introdujo en los maizales con gran valentía y tomó en su pico unas semillas de maíz.

Tho, cuyos ojos se volvieron verdes como los del tomate, se acercó a a felicitar a Dziú, comprobando que las alas de éste ahora eran grises y sus ojos rojos como el fuego. Todas las demás aves, que  habían salvado las semillas de las otras plantas, se reunieron y, reconocieron el arrojo de Dziú. A propuesta de Toh, decidieron recompensarle, dejándole en adelante poner sus huevos en el nido de cualquier pájaro con la promesa de cuidarlos como propios.

Así es como Dziú empezó a poner sus huevos en el nido de los otros pájaros, teniendo la seguridad de que su crías serían cuidadas y protegidas como él lo habría hecho.

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sábado, 22 de mayo de 2021

Kheper

Es un dios egipcio, encarnación el sol naciente y símbolo de la resurrección. Se creía que toma la forma de escarabajo y pone el sol como una bola en el cielo y la hace rodar, por la noche la rueda por el inframundo hasta que llega el nuevo día y comienza de nuevo. Se le representa como hombre con cabeza de escarabajo; o bien como una cabeza de hombre coronada con un escarabajo.

Los egipcios al ver que el escarabajo pelotero hace rodar una bola y la deposita en su madriguera, pensaron que un dios escarabajo hace lo mismo en el cielo con la bola del sol.

En la momificación de los difuntos, a estos se les solía poner sobre el corazón el amuleto del escarabajo para que pesase a su favor a la hora del juicio final.

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lunes, 17 de mayo de 2021

Origen de la planta del Guaraná

 

Según una leyenda amazónica, un día el dios Tupá escuchó el ruego de una pareja de indios que le pedían poder tener descendencia, pues llevaban mucho tiempo sin conseguirlo, y el dios hizo que tuvieran un hermoso niño, que fue pronto muy querido por toda la aldea.

Pero Jurupari, el envidioso dios del mal, un día en el que el niño estaba en el bosque, se convirtió en serpiente venenosa, mordió al niño y éste murió.

La naturaleza protestó en forma de tormenta, la madre del niño entendió que Tupá le pedía que plantase los ojos de su hijo. Así lo hizo la madre y nació el hermoso arbusto del guaraná cuyas semillas tanto se parecen a los ojos de los hombres.

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martes, 11 de mayo de 2021

El Mokéle-mbèmbé

Es otro animal mítico de la cultura pigmea. Es conocido con nombres distintos en Camerún, Gabón o África Central. También se ha discutido sobre la posibilidad de su existencia real. Los pigmeos lo describen como un animal de color gris, de tamaño mayor al de los elefantes, con un cuello largo y un solo diente. Sale de los ríos en busca de alimentos y los obtiene de los hipopótamos y de los humanos. Por esta razón los pescadores evitan las zonas pantanosas, donde creen que estos animales suelen habitar.

Hay quien explica el nacimiento del mito con una historia, según la cual, los pigmeos mataron un mokéle-mbèmbé, cocinaron y comieron partes del animal y murieron los participantes por envenenamiento.

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lunes, 3 de mayo de 2021

Leyenda de Guanina y Sotomayor

 

En una aldea taina de la isla de Borinquén (Puerto  Rico), había una joven india, llamada Guanina, que era  hermana de Agüeybaná el jefe de la tribu. Cuando llegaron los conquistadores españoles, el indio Guarionex estaba enamorado de Guanina, pero ésta no le correspondió porque estaba enamorada a su vez de Cristóbal de Sotomayor uno de los conquistadores.

Agüeybaná, cansado de los malos tratos que recibían de los españoles, reunió a sus hombres para decirles que para volver a ser libres, los españoles tenían que morir.

Guarionex fue en busca de Sotomayor para darle muerte, pero no lo encontró en su poblado, porque Guanina le avisó de que querían matarle. Sotomayor con sus soldados se enfrentó a los indios, acompañado de Guanina. En un momento determinado de la batalla Guanina se interpuso entre Sotomayor y los guerreros enemigos y recibió un herida mortal. Al tiempo Agüey baná atravesó con una flecha a Sotomayor y cayo en brazos de su amada Guanina.

Los españoles enterraron a los dos amantes juntos, al pie de un árbol. Aún hoy dicen los indios que, en las noches, cuando el viento agita las ramas, se oye un murmullo que no es otra cosa que el canto de sus almas.


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