Trino el Brujo

Según una leyenda colombiana, Trino el Brujo era un personaje que conducía el ganado de novillos desde San Juan Nepumeceno hasta Barrancas, en un corto espacio de tiempo, montado en el novillo más brioso, cantando canciones y acompañándose de una acordeón que en una tienda del puerto le regaló un tendero. Era tan virtuoso tocando la acordeón que pronto adquirió fama, siendo requerido para amenizar, reuniones, bodas y banquetes. Al tiempo que tocaba inventaba las letras de sus canciones. Una sobre todo, de título  ‘La vaca vieja’  se hizo tan famosa que se constituyó en el himno de la comarca.

Cuenta la leyenda que el mítico Francisco el Hombre, que había vencido al mismo diablo tocando el Padre Nuestro al revés, sintió celos de Trino el Brujo y lo retó a tocar desde la  loma de La Piñata. Trino le respondió desde un otero. El uno tocaba en un estilo y el otro le contestaba, quedando empatados los dos por mucho tiempo.

Pero cuando Trino el Brujo interpretó ‘La vaca vieja’ no tuvo de Francisco el Hombre  respuesta alguna, sino la sensación de alguien que se alejaba.

 (Resumen de la leyenda que cuenta el poeta Reinaldo Castillo Cuevas)

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